martes, 22 de julio de 2008

Cheek to cheek





Esta tarde he ido al cine. He pasado de las dos opcionales que había, y me he puesto con los casos nada más comer.

Me moría de ganas de ir desde la primera semana, cuando descubrí este cine en la calle principal de Palo Alto. No me lo podía creer... Hoy me he enterado de que fue el hijo de David Packard el que se encargó de la remodelación y de proveer fondos para que nunca tenga que cerrar.

He ido a ver Top Hat, de Fred Astaire y Ginger Rogers, y me lo he pasado como un enano. Lo mejor es que había bastante gente. El cine es enorme y no estaba lleno, pero no habría menos de 150 personas. Después de cada número musical todo el mundo aplaudía, al final hasta yo aplaudía.

He llegado a tiempo para cenar algo y meterme rápidamente en el grupo de trabajo. Es la primera vez que me he sentido con fuerzas para discutir un caso de finanzas.

El caso es espectacular: una empresa que tiene cerca de 50 millones de caja y sólo 19 de deuda, con las acciones valoradas a 41 dólares, decide repartir un dividendo por acción de 40 dólares y para ello pide un crédito de 300 millones de dólares. El mundo al revés, pero la cosa funciona porque las acciones terminan a 20, la operación les da para pagar la deuda y evitan que alguien de fuera llegue y les compre con su propio dinero, como pasó en el caso del otro día. Pecas, me explico?

En la clase esta mañana he aprendido lo que son los bonos convertibles, y como en contra de lo que parece no son deuda barata. Yo me entiendo...

En estos días da la sensación de que están intentando de alguna forma cerrar el círculo uniendo con las clases de las primeras semanas. Por un lado lo hace un poco repetititivo, pero por otro lado a muchas cosas que antes se veían sueltas ahora es más fácil encontrarles el sentido. En una de las clases nos han pasado una encuesta para vér hasta qué punto nuestras empresas estaban orientadas al cliente, y no hemos quedado demasiado mal. Ha sido espectacular como dos tipos de Cisco, que han hecho la encuesta por separado, han llegado a resultados de 91 y 93 puntos (podían estar entre 24 y 120)

La otra clase me ha encantado pero no porque me haya enseñado nada nuevo, sino porque me ha reforzado en algunas de las cosas que no he hecho sino repetir los´últimos años. No hay nada más estratégico que el presupuesto, lo único que es verdaderamente estratégico son los actos, la clave es "execution, execution, execution". Es la ejecució la que conforma la cultura.

Antes de mañana a mediodía tengo que elegir las clases de la semana que viene. Por ahora tengo claro Comercio Electrónico, y una con un nombre que parece de nouvelle cousine: "How Leaders Use Power Effectively-and Why They Sometimes Get it Wrong". La he elegido porque la han puesto en dos turnos distintos, y eso quiere decir que no quieren que nadie se la pierda, debe ser buena. Hay otras dos horas que aún no sé que hacer, ninguna de las que ofrecen me convence demasiado.

Mañana por la mañana toda la familia se va a Deba. Los niños están como locos pero aunque allí luego van a estar fenomenal para A me imagino que el movimiento será bastante paliza, y seguro que sola le cuesta más la llegada. Luego estarán mucho mejor, seguro. A mí me da pena que no se llevan ordenador así que no vamos a poder vernos y hablar con Skype. Espero que al menos encuentre un acceso a internet para ver el blog.

También me va a costar más pensar que me estoy perdiendo el plan de Deba y en especial a los niños en Deba, porque ahí les difruto más que en ningún otro sitio. Basta con verles... Rocío sabe perfectamente que no hay cosa que me guste más que sentarme en el paseo de la playa por la tarde a leer mientras ellos van y vienen con las bicis. O ponerme los patines y acompañarles, o pescar corrocones con Roque, o ir al puevlo a hacer recados y comprar la bono loto, o ir a por un pinchito con Amparo, o dar paseos en la piragua, o... No, casi mejor lo dejo.

De todas formas estoy ya mucho más tranquilo, me he dado cuenta dec que lo que necesito es no pensar en lo que queda sino concentrarme en cada día, en disfrutar de cada momento. Como ayer decía, pero necesito repetírmelo, habría venido aunque fuera sólo para dos semanas.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Amigo, apunta bien la fórmula, por que a mi no me cuadra. Ya me lo explicarás.